Miguel Fererra (El Charro) y Don Quijote de la Mancha
Redacción
El domingo pasado, en la cebración del Dia Nacional de la Juventud, Jacagua Express sorprendió al alcalde Miguel Ferrera (el Charro) con un obsequio que fue entregado después de terminada la primera entrega de reconocimientos a los jóvenes destacados del Distrito Municipal San Francisco de Jacagua.
El regalo dado el alcalde fue una estatuilla con la figura del icónico personaje de la literatura universal Alonso Quijano conocido como Don Quijote de la Mancha. En una breve entrega, en la que estuvo presente la Lic. Papia Peralta, esposa del alcalde, los representantes del Jacagua Express le entregaron su regalo explicando las razones de la entrega.
El Charro reaccionó de dos maneras encontradas, quería hablar, pero no le salían las palabras y al mismo tiempo quizo contener las lágrimas pero no las pudo contener. Escapó a un lugar donde no se vieran las emociones y al ser auxiliado por su exposa solo nos dijo -Ya lo hicieron llorar-. Luego de entender que ya podía volver, agradeció el gesto expresando que se sentía sumamente sorprendido.
¿Qué motivó este regalo?
Las veces que Jacagua Express ha ido al despacho del alcalde a cubrir distintos eventos noticiosos, ha notado que el cuadro del Quijote que cuelga de las paredes de esta oficina es una de las prendas más cuidadas y celadas por Miguel Ferrera. En las ocasiones que le hemos hecho preguntas (off record) sobre este personaje nos ha hablado, con gran pasión, sobre las razones por la que se identifica con el loco más querido de la literatura universal. Esa pasión es compartida por nosotros y fue ese gusto mutuo por un mismo personaje lo que motivó el regalo.
¿Cambia esto nuestra posición crítica con la gestión del Charro?
A nuestros lectores, les decimos, les aseguramos, que Jacagua Express es un periodico digital que no tiene parcialidad con esta ni con nunguna gestión gubernamental nacional, congresual ni municipal, de manera que, a pesar de haberle regalado ese detalle al alcalde, mantendremos nuestra posición de velar, con ojo avizor, por el buen manejo de los recursos públicos.
