Ni una menos
Por Rosalba Martínez
Después de ver los encabezados de los periódicos digitales la semana pasada, los cuales afirmaban que eran tres los casos de feminicidios en menos de 24 horas, me inquieta el hecho de no saber cuándo el hombre será más consciente de la misión de la mujer en la tierra y logrará entender que las mujeres no somos de su propiedad y que no estamos destinadas a cargar siempre con esa cruz, nada justifica que te quiten la vida.
Entiendo que la mujer al ser delicada y femenina se ve como si fuera débil, pero si analizamos nuestra anatomía, Dios puso en nosotras la responsabilidad más grande, somos portadoras del vientre que sostiene la vida, tenemos que lidiar todos los meses con la regla, en la mayoría de los casos muy dolorosa e incómoda, somos madre, esposa y trabajadora. Nos han mentido y nosotras hemos caído rendidas, no somos débiles, somos una creación divina perfectamente diseñada, sin importar raza, tipo de cuerpo, cara o nivel de educación. Cada día más mujeres hacen grandes aportes a la literatura, a la filosofía, la cultura, el arte, la medicina y otras áreas importantes para el desarrollo de la sociedad. Pero aun así hay muchas que sufren calladas al ser maltratadas y minimizadas por quien en algún momento prometió amarlas.
Las mujeres ya no buscamos un dueño sino alguien que sea nuestro compañero, alguien que nos ayude a lograr muchas cosas juntos, que ame nuestras cosas buenas y nos ayude a superar las malas. No te dejes minimizar, no te quedes callada ante el abuso, ya este sea físico o no, denúncialo.
Yo espero y creo que esto puede cambiar, no tenemos que esperar que nos conviertan en un individuo en peligro de extinción, para que se nos valore como lo que somos.
“La flor más bella que Dios puso en la tierra, instrumento para traer la vida, la mujer, la mamá, la hermana, la esposa y la hija. antes de matarla piensa que en ella Dios puso la semilla para que tú germinaras y no hay nada que valga más que la vida.”